Banyan Tree Cabo Marqués: un santuario entre acantilados para celebrar el amor
- Jaydee Turru
- 12 sept
- 2 Min. de lectura

En lo alto de los acantilados del Pacífico, donde el mar abraza la selva y el horizonte parece eterno, existe un lugar que redefine lo que significa decir sí, acepto. Se trata de Banyan Tree Cabo Marqués, el refugio más exclusivo de Acapulco, un escenario íntimo que combina naturaleza, lujo y privacidad absoluta para celebrar bodas que se transforman en verdaderas obras de arte.
Más que un hotel, Banyan Tree es una experiencia sensorial: el susurro de las olas, el aroma de la vegetación tropical y la arquitectura de inspiración asiática crean una atmósfera que parece hecha a medida para los enamorados. Cada boda aquí es un traje a la medida, diseñada con la complicidad de wedding planners y un equipo que cuida los detalles como si fueran pinceladas de un cuadro irrepetible.

El resort cuenta con rincones que enamoran a primera vista: el Jardín Saffron, íntimo y elegante; el Jardín Amate, rodeado de verde profundo; el Mirador, donde el océano se convierte en testigo; y el icónico Deck y Jardín Reflections, el spot más solicitado por parejas que buscan un marco inolvidable para su unión.
La exclusividad se respira en cada espacio: 45 villas con alberca privada, la opción de buy-out para una privacidad total, y experiencias que van desde cenas románticas bajo las estrellas hasta rituales de spa, yoga en pareja o desayunos flotantes en la intimidad de la villa. Todo pensado para que cada instante sea un recuerdo eterno.
El banquete es otra historia por sí misma. La propuesta gastronómica va desde menús de autor hasta cocteles y estaciones buffet, con la promesa de que cada bocado evoque tanto al lugar como a la esencia de los novios. Y como broche de oro, las puestas de sol que tiñen de dorado el Pacífico, regalando el escenario más romántico que se pueda imaginar.

Diseñado para recibir bodas destino con más de 70 invitados, Banyan Tree Cabo Marqués no solo atrae a parejas mexicanas, sino también a quienes desde otros rincones del mundo buscan la magia de Acapulco en un entorno sofisticado, íntimo y profundamente auténtico.
Así, Banyan Tree Cabo Marqués reafirma su espíritu: un santuario de lujo y exclusividad donde cada boda se convierte en una historia única, tan singular como quienes la protagonizan.
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