Buenas prácticas del turismo que avanzan hacia la sostenibilidad en Baja California Sur
- Passpartout

- 19 sept
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En Baja California Sur, la sostenibilidad ha dejado de ser un ideal para convertirse en una práctica tangible y obligada que permea distintos sectores productivos y turísticos. Comunidades, empresarios y navieras están adoptando modelos de operación que buscan equilibrar la actividad económica con la protección del entorno natural, un activo invaluable para la región.
Ejemplos como Cabo Pulmo, donde la organización comunitaria sostiene un modelo ecoturístico de bajo impacto, o restaurantes de prestigio como Acre, Flora’s Field Kitchen y Bar El Minero, que apuestan por compostaje y la reducción de plásticos, muestran que es posible generar ingresos mientras se cuida el ambiente.
Actividades de bajo impacto
Cabo Pulmo es un buen ejemplo de un destino que se ha enfocado en ofrecer actividades de bajo impacto para proteger los ecosistemas. Bajo una fuerte organización comunitaria, el destino ofrece actividades ecoturísticas que minimizan el impacto ambiental, como buceo, práctica de snorkel, kayakismo, campismo, senderismo y ciclismo. Al recibir un flujo considerable de visitantes, ofrecen información clara y visible de las especies vulnerables presentes, sumado a reglas que los visitantes que deben seguir en todo momento durante su visita. Este enfoque sostenible ha permitido a la comunidad cuidar del ecosistema y percibir ingresos al mismo tiempo.
Hoteles con visión sostenibible
En la hotelería existe una enorme oportunidad de avanzar hacia un manejo sostenible de recursos en Baja California Sur. El Hotel El Ganzo, en San José del Cabo, es un claro ejemplo de compromiso: cuentan con un Sistema de Gestión Medioambiental que les permite medir, reducir y controlar residuos, permitiendo acciones concretas para lograrlo. Dentro de las instalaciones se realiza composta con los desperdicios orgánicos y miden la huella de carbono generada por cada huésped, apoyando con la compra de bonos de carbono como medida de compensación.
Residuos que se vuelven fertilizantes de huertos locales
El restaurante Acre en San José del Cabo, Baja California Sur, es un emblema estatal de sostenibilidad. Reconocido mundialmente por su cocina de autor, el restaurante sudcaliforniano da un uso final a los residuos orgánicos al ingresarlos al área de composta, donde se convertirán nuevamente en nutrientes de sus huertos.
Otros restaurantes como Flora´s Field Kitchen, en San José del Cabo, y Bar El Minero Restaurante, en El Triunfo, también realizan un manejo de residuo orgánicos, además de que buscan bajar a cero el uso de plásticos de un solo uso.
Manejo inteligente de residuos y disminución de plásticos de un solo uso
Actualmente el puerto de Pichilingue cuenta con una política que impulsa a proveedores y visitantes a evitar los plásticos de un solo uso, además de responder activamente al manejo eficiente de residuos a través del programa de Puertos y Comunidades Circulares. Asimismo, no permite la recepción de residuos sólidos generados por los cruceros durante su arribo, evitando mayor carga sobre los rellenos sanitarios municipales.
En lo que corresponde a cruceros, las embarcaciones Carnival Cruise Line cuentan con tecnologías y prácticas que fomentan la separación y reducción de residuos a bordo. Activamente separan aluminio y cartón en los procesos a bordo, y cuentan con biodigestores para el tratamiento de residuos orgánicos, con los que han logrado reducir un 44% en los desperdicios alimenticios generados por pasajero, con la meta de alcanzar un 50% para 2030.
La conjunción de estas iniciativas refleja una tendencia en crecimiento: la integración de prácticas sostenibles en distintos niveles de la economía local. Más que casos aislados, se trata de un mosaico de acciones que, en conjunto, fortalecen la competitividad de Baja California Sur como un destino que no solo ofrece belleza natural, sino también compromiso real con el futuro del planeta.






















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