Valle: canciones que sostienen el corazón
- Gris Cruz
- hace 2 días
- 2 Min. de lectura
Imagen tomada de las redes de la artista
Hay canciones que no nacen para sonar en la radio. No buscan likes, ni tendencias, ni playlists de moda. Nacen para acompañar, para quedarse y otras tantas paara sostener.
Eres Luz, el nuevo sencillo de Valle, pertenece exactamente a ese territorio.
Valle no grita. No corre. No se impone. Su voz llega como un abrazo largo, honesto y necesario. “La música para mí nace de la necesidad del alma de decir algo que con palabras solas no alcanza”, comparte la cantautora mexicana, quien lleva más de dos décadas caminando una trayectoria coherente, sensible y profundamente humana dentro del pop–folk emocional.
Imagen tomada de las redes de la artista
Eres Luz fue escrita hace siete años, tras la muerte de su padre. Durante mucho tiempo no pudo cantarla. Dolía demasiado. “Era una conversación íntima con mi papá”, confiesa. Hasta que un día entendió que la canción ya no era solo suya sino que podía abrazar a otros y que podía ser luz en medio del duelo.
Esto justamente se siente. La producción, a cargo de Memo Méndez-Guiú y Joel Alonso, construye un paisaje sonoro delicado, lleno de pianos, cuerdas y capas vocales que no buscan lucirse, sino acompañar. Valle lo dice claro: “Esta canción no es para que me califiquen como cantante, es para que se sienta”.
La charla con Valle no se queda solo en la música. Habla de maternidad, de adopción, de romper silencios y tabúes. “Mis hijos son mi sueño hecho realidad”, dice con firmeza. “No existe la familia normal. Todas las familias son diferentes y todas son igual de válidas”.
También habla de madurez, de crear sin prisa y sin miedo a la edad. “En el arte no hay edad. Este es mi momento perfecto para salir como cantautora”. Hoy escribe desde la experiencia, desde la conciencia, desde la verdad que solo dan los años vividos.
Valle vive en Tepoztlán, rodeada de naturaleza, familia y servicio. Es voluntaria en una casa hogar y suele llevar su música a causas sociales. Para ella, el arte también es un acto de servicio: “Que la canción abrace, que ayude a llorar, que acompañe: para eso está”.
Eres Luz no niega el dolor, pero elige dónde poner la mirada. “El sufrimiento es opcional”, reflexiona Valle. “Siempre hay un pedacito de luz al que te puedes enganchar, incluso en el duelo”.
Y quizás por eso su música se queda. Porque no promete respuestas, pero sí compañía. Porque no corre, pero camina contigo.
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